Té Verde: maneras de tomarlo      

Estamos ante una de las bebidas más sanas que podemos conseguir en la actualidad: el té verde natural.

Y es que gracias a sus incomparables cualidades, excelentes propiedades antioxidantes y los múltiples beneficios que tiene para nuestra salud, esta milenaria bebida procedente de Asia ha dejado de ser una simple moda del momento y se ha convertido en una bebida indispensable para muchos.

Día a día son muchas las personas que se animan a tomar té verde, sobre todo gracias a una de sus principales cualidades, su capacidad de actuar como quemagrasas natural y ayudar a bajar de peso a quienes sufren por tener unos cuantos kilitos de más.

Maneras de disfrutar de esta bebida hay varias, y a continuación te presentaremos las más comunes para que puedas disfrutarlas cuando quieras.

Té verde básico.

Para la receta básica simplemente necesitaremos 500 ml de agua (2 tazas) y 5 gramos de té verde, nada más.

Calentaremos el agua lo suficiente sin permitir que llegue a hervir. Una vez caliente, añadiremos nuestras hojas de té y dejaremos reposar no más de 3 minutos. Retiramos las hojas y procedemos a servir nuestro té, pudiendo dejarlo reposar o incluso agregarle hielo si lo queremos fresco.

Ésta es la variante básica, a partir de la cual podemos realizar numerosas combinaciones para conseguir mejor sabor y mejores propiedades. Lo más común es endulzar el té bien sea con miel, azúcar o algún edulcorante, ya que esta bebida posee un característico sabor a hierba que puede no ser del agrado de todos.

Otra excelente combinación es agregarle zumo de limón al té, lo cual aparte de dotarle de ese sabor inconfundible, también añadirá una cantidad extra de antioxidantes y vitaminas a nuestra infusión.

Batido de té con aguacate

Este batido es una bomba energética súper saludable, que combina todos los beneficios del té verde con las grasas benéficas y el aporté energético del aguacate. Para prepararlo sólo basta con licuar medio aguacate junto a media taza de té verde, ¡y a disfrutar!

Manzanilla y anís para una buena digestión

Si tomamos un litro de infusión de té verde, la calentamos, le agregamos una cucharadita de anís y una cucharada de manzanilla y dejamos reposar unos minutos, obtenemos una excelente infusión que nos ayudará a aliviar malestares estomacales, indigestión, pesadez y otros síntomas del tracto digestivo.

¿Y si añado menta y jengibre?

Excelente idea! De esta manera obtendrás una bebida muy refrescante, y que resulta ser una excelente fuente de antioxidantes, aparte de actuar como un quemagrasas súper repotenciado.

Toma un litro de té, y licúalo junto a un trozo pequeño de jengibre, una cucharada de menta y un poco de hielo para crear una bebida muy refrescante con un sabor estupendo, ideal para esos días calurosos de verano.